A mi querido colegio

ESCRITO POR: Mariana Andrea Pinzón Martinez

Hace muchos años, llegaron unas hermanas a un terreno que quisieron ir convirtiendo en un colegio. Nuestra fundadora fue Marie Poussepon, la que un día se encontró con una niña llamada Yanira. Hablaron un rato y se hicieron muy pronto amigas.

Marie y Yanira viajaron al futuro un día en una máquina dell tiempo muy bonita. Además, en el futuro nadie las veía, solo ellas veían el futro. ¡era increíble! había mitad ciudad antigua, mitad ciudad moderna. Lo mejor era que habían robots: uno de madera y otros de metal. Habían muchos bailes extraños, gatos, perros que podían hablar español. Las mascotas tenían un botón en donde los dueños elegían qué velocidad darles.

Un día, Yanira, que ya era joven, vio a un muchacho que le gustó mucho; pero en realidad, estaba enamorada de Dios, pues desde niña quiso dedicar su vida a Él. Marie Poussepin la felicitó por decidirse por ese camino y le contó que ella lo había vivido y que era muy lindo. Luego de unas horas, regresaron al presente y servir al mundo siendo Hermanas.